Sinopsis
Han pasado algunos años desde la masacre el Campamento Arawak.Angela Baker es dada de alta de la institución mental en la que estaba confinada y empieza a trabajar como monitora en un campamento cercano donde empieza a aplicar su particular visión de lo que debe ser un grupo de campistas perfecto… aunque para ello haya que eliminar a las malas hierbas.
Campistas poco alegres
Campamento sangriento 2 es, evidentemente, la secuela de Campamento sangriento. Con un tono más ligero, casi orientado hacia la comedia/parodia, con el mismo presupuesto bajo cero y cayendo alegremente en muchos más tópicos y lugares comunes habituales en el género. Aprovechando que las campistas son mayores que las de la película anterior, hay mucho destete absurdamente gratuito, en plan «soy chica y tengo la necesidad imperiosa de enseñar las tetas a la mínima oportunidad, así sin más excusa.»
Perdido el factor sorpresa de la primera parte en la que, ejem, no sabíamos quién era el asesino, el recurso en esta secuela es convertirlo en protagonista. Y la cosa funciona, sobre todo por la excelente interpretación de Pamela Springsteen (sí, es la hermana pequeña de Bruce) que, sin disfraces, máscaras o deformidades, con esa mezcla entre Sor Ye-yé y Norman Bates es aterradoramente inquietante. Angela consigue caerte mal precisamente gracias a sus excesivos y acaramelados intentos de ser simpática, pero nunca te atreverías a reconocerlo delante de ella… por si acaso.
El ritmo es continuo, pasando de una situación que origina un asesinato a otra con bastante fluidez aunque poca lógica. Pero vamos, tampoco llega a dejarte pegado a la pantalla durante los menos de 90 minutos que dura.
Las muertes son originales pero siguen sin estar muy conseguidas visualmente. Sin lugar a dudas, destaca sobre todas el ahogamiento en caca… o el homenaje/enfrentamiento entre Freddy, Jason y Caracuero.