3 del infierno (2019) – continúa el psycho western
3 del infierno es la mejor de la trilogía. Funciona tan bien que deseas que sea la última, para evitar que la caguen con una secuela.
3 del infierno es la mejor de la trilogía. Funciona tan bien que deseas que sea la última, para evitar que la caguen con una secuela.
La Juventud es una emotiva película que ofrece profundas reflexiones sobre la condición humana, el sentido de la vida, el paso (y el peso) del tiempo… todo hábilmente promocionado con el culo de Mãdãlina Ghenea y con la aparición estelar de Diego Armando.
Los renegados del diablo asienta a Rob Zombie como un gran director de terror, aunque en este caso se centre más en hacer una road movie con tintes de western que en una película «gore» como la primera de la saga.
Reflejos ofrece una historia más o menos bien llevada con elementos policíacos entremezclados con momentos de suspense y terror, buenas dosis de sangre y un final explosivo (literalmente).
La casa de los 1000 cadáveres es el debut cinematográfico de Rob Zombie. Un homenaje al género slasher y al terror setentero.
Crónicas de Navidad es pura fantasía para toda la familia, correcta y disfrutable, no llega a ser tan empalagosa como otras propuestas festivas. Tenemos nostalgia, elfos, conflictos familiares, renos, persecuciones en coche, regalos llenos de emotividad y vuelos en trineo.
Holmes y Watson es una completa pérdida de tiempo, pero contiene un cambio de registro durante minuto y medio que me pareció gloria bendita.
Dime quién soy, serie basada en la novela homónima de Julia Navarro es un sí pero no. Cuando la historia merece la pena, pero el personaje y actriz no valen un pimiento, tienes que escoger qué tiene más peso.
Matar a Santa es una película que mola mucho a pesar de no pretenderlo, o quizás precisamente por eso. Tiene un Papa Noel en quiebra, niños malos, niños buenos, militares, elfos y un asesino a sueldo.
The Watch es la nueva apuesta de la BBC para dar a conocer el universo Pratchett a todos los habitantes del disco. Merece mucho la pena.