La primera purga: La noche de las bestias es una precuela de la saga de la Purga, que cuenta con otras tres películas (de las que ya comenté cosas no hace mucho) y una serie con dos temporadas (por el momento). James DeMonaco, principal responsable de la franquicia, se ocupa en esta ocasión solo del guión y cede la silla del director al debutante Gerard McMurray. Hay una importante caída de calidad, hasta el punto de que a veces parece un telefilme más que una producción hecha para la gran pantalla. Los actores son bastante flojos, los personajes son muy simples, y el desarrollo de la trama en sí es muy endeble.
Para mantener durante el resto del año la tasa de criminalidad por debajo del 1%, los Nuevos Padres Fundadores de América ponen a prueba una teoría sociológica que da rienda suelta a todo tipo de agresiones durante una noche en una comunidad aislada. Pero cuando la violencia de los opresores se encuentra con la ira de los marginados, el vandalismo explota más allá de esas fronteras “experimentales” para extenderse por todo el país.
La noche de las bestias (2013) era un correcto home invasion en un escenario limitado y con pocos personajes, con un suspense muy bien llevado; las dos secuelas derivan más hacia la acción con algo menos de intriga, añadiendo elementos de crítica social y política mientras varios personajes se cruzan durante la noche de la purga. Aún así, en las dos primeras y, un poco menos en la tercera, se conseguía transmitir una continua sensación de inquietud y desasosiego; algo que desaparece completamente en ésta.
La primera purga es un simple thriller de acción que transcurre en un barrio marginal en el que además los miembros de una banda de narcotraficantes van a aprovechar la purga para empezar una guerra por el liderazgo. Que sea un thriller de acción no es malo per se, pero es que además es muy lento. La presentación de la situación es bastante tediosa, los personajes no calan en ningún momento y el ritmo es flojo e irregular hasta la mitad del metraje aproximadamente.
Se explica el origen del evento sin apenas añadir nada que no se haya contado antes. Si eso, el hecho de que esa primera purga iba a ser solo un experimento localizado (y remunerado) en un barrio marginado… experimento con resultados amañados para ampliarlo a todo el país.