Sinopsis
Continúa el romance de Gwendolyn Sheperd y sus esporádicos viajes por el tiempo, mientras espera que se cumpla la profecía en la que tiene que morir para que el malévolo Conde de Saint Germain se alce con el poder absoluto.
A veces el tiempo es una estricta progresión de causas y efectos
La última viajera del tiempo: Esmeralda es el final de la trilogía «El amor a través del tiempo», de Kerstin Gier. Supongo a partir de aquí que se han leído las entradas sobre las películas anteriores o que se conoce el contexto de la saga. Habrá algún que otro spoiler.
Gwendolyn Sheperd está ahora en posesión del primer cronógrafo, robado por Lucy y Paul, y se dedica a viajar por el tiempo sin el control de la Logia… bueno, hace uno o dos viajes, y cambia cosas en el pasado sin que aparentemente se enteren las mariposas. Y después vuelve al tira y afloja con Gideon de Villiers, la confianza, las mentiras, los secretos… y un poco a la investigación de la profecía que cambiará el orden mundial y provocará su muerte.
La conclusión de la trilogía no tiene demasiadas sorpresas y es bastante lineal, a pesar de tener viajes en el tiempo y alteraciones de la continuidad que apenas afectan a nadie. Me ha quedado la sensación, que ya tuve un poco en la segunda parte, que han adaptado fragmentos de los libros de forma aleatoria, sin tener en cuenta que en las partes que no se incluyeron en la adaptación había explicaciones que afectaban a cosas que salen en la peli. Todo muy confuso.
Se deja intuir que la logia y el conde ya habrían cumplido la profecía en el pasado por lo menos desde la mitad de la segunda parte, aunque para la continuidad de Gwen eso aún sucederá en su futuro (aunque ya haya pasado XD ). De todas formas, es una idea que se deja caer así como que no quiere la cosa, y con la misma rapidez pasan de puntillas sobre ella y no se profundiza lo más mínimo en ella. Una pena.
Al final, todo el mundo es bueno; los rencorosos y los traidores reconocen sus pecados, se les perdona y se hacen amigos del alma; y los malos muy malos desaparecen gracias a un pequeño deus ex machina que cambia el continuo espacio-tiempo con el único efecto aparente de borrar a los malos de la historia.