La casa de las sombras del pasado no es una gran película. Empieza bien, sí, pero se va estancando un poco hasta casi el final, que es muy discutible por su resolución, pero el sólo hecho de poder ver juntos a Vincent Price, Christopher Lee, Peter Cushing merece la pena y pasas por alto las fallas que tiene la película.
El escritor Kenneth Magee se apuesta 20.000 dólares con su editor a que es capaz de escribir una novela de terror en 48 horas y para ello se traslada a una vieja mansión en Gales. Pero sus esfuerzos se ven interrumpidos por la llegada de varias personas a la casa. Resulta que son todos miembros de la familia Grisbane, propietarios de la mansión. Kenneth se entera de que hace cuarenta años un miembro de la familia, Roderick, fue encerrado en el ático y tratado como un animal después de que violara y matara a una mujer. Pero cuando abren el ático, se encuentran con que Roderick ha escapado.
Sinopsis de La casa de la sombras del pasado
Sí, La casa de las sombras del pasado está llena de errores dirección, iluminación, fotografía… La dirección de Peter Walker dista mucho de las producciones de la Hammer Films. Obviamente, aquí estamos delante de una producción de la fábrica de salchichas que era Cannon Group, en ese año llevada por Menahem Golan y Yoram Globus, que serían como los Asylum de la época.
Peter Walker intenta recrear ese terror gótico que tanto nos gusta, pero de una manera poco efectiva. No hay tensión alguna hasta que entra Vincent Price en escena, y con unos pequeños trucos de iluminación, sonido y un contrapicado, obtenemos algo de lo que veníamos a buscar.
No es hasta que están los 3 en la casa que empieza la película. Una mansión enorme y antigua, secretos de familia, rencillas familiares y un escritor que ni pincha ni corta y que sólo había ido allí a escribir una novela.
La casa de las sombras del pasado hay que verla, sí o sí, pero en versión original, por favor. No sólo por las voces de los 3 grandes, sino por la traducción. El traductor debe pensar que tenemos cromosomas de más y que no sabemos diferenciar Gales (versión original) de Escocia (versión doblada). Debe pensar que cuando el escritor pone título a la novela que va a comenzar a escribir como «Midnight Manor» y nos lo traduce por «Medianoche en manor» nos vamos a quedar complacidos.
Lo dicho, a verla el que no lo haya hecho. Os dejo el tráiler.
A partir de aquí con Spoilers
No es que el final sea malo o esté muy visto (no estaba tan visto en 1983), sino que la antesala del mismo, la celebración con pinchos del montaje teatral termina muy pronto, pasan página muy rápido y queda un cambio muy brusco.
Es una chorrada, pero si tan sólo hubieran cuidado un poco más este tema, la película ganaría enteros.