Sinopsis de The Umbrella Academy -Temporada 2-
La Academia Umbrella ha acabado dispersa en Dallas, Texas, a principios de los años 60, unos días antes del asesinato de Kennedy. La cuenta atrás hacia un nuevo apocalipsis mundial ha empezado y tienen que encontrar la manera de reunirse, detener otra vez el fin del mundo y volver a su línea de tiempo.
Poniendo al mundo en peligro desde 1963
The Umbrella Academy es una adaptación (muy) libre de los tebeos escritos por Gerard Way, vocalista del grupo ‘My Chemichal Romance’, y dibujados por Gabriel Bá. Desarrollada por Steve Blackman y Jeremy Slater, a pesar de ciertas diferencias importantes, se mantiene bastante fiel a la esencia del material original. A partir de aquí doy por vista la primera temporada y cuelo algún pequeño spoiler de la segunda.
Los primeros 5 episodios son bastante tranquis, con los personajes reagrupándose y separándose, cada uno un poco a su bola. Si al final de la primera tanda escapaban por los pelos del fin del mundo que ellos mismos habían desencadenado (aunque de forma más o menos involuntaria), al principio de esta segunda vemos que han acabado viajando a principios de los años 60, a Dallas, pero cada uno de ellos a un año diferente. En un maravilloso primer capítulo descubrimos que el apocalipsis los persigue, y en los siguientes vamos viendo como cada uno de ellos se ha aclimatado a su desplazamiento espaciotemporal, al mismo tiempo que la trama central avanza poco a poco.
El punto álgido se produce en el ecuador de la temporada…
A partir de ahí la trama se acelera, hasta desembocar en una espectacular batalla multitudinaria y un desenlace que, de nuevo nos vuelve a dejar colgados con un cliffhanger de mandíbula al suelo y montones de preguntas sin respuesta (de momento).
Ya conocemos a los personajes de la primera temporada, así que ahora asistimos a su desarrollo, incluyendo un poco más de protagonismo para algunos que habían sido poco tratados en la anterior entrega. Eso sí, se echa de menos un contrapunto antagonista como el que ofrecían Hazel y Cha-Cha, que no tienen un equivalente a la altura en estos episodios; los suecos son bastante chof.
De nuevo vuelve a ser destacable la selección musical, con una variedad de canciones famosas y/o versiones que abarcan varios géneros y añade un toque especial a determinados momentos relevantes en la trama.