Sinopsis
En Terminator 3 han pasado 10 años desde que John Connor evitara el día del juicio final; ahora sobrevive sin oficio ni beneficio alejado de redes sociales y de cualquier contacto humano. Pero desde el futuro siguen lloviendo androides asesinos…
Risas enlatadas… ja… ja…
Al igual que la otra película que he comentado esta semana, Terminator 3 es la típica historia que me llama la atención (en fin, es Terminator y sale Claire Danes, no necesito mucho más), y que por uno u otro motivo no he llegado a ver hasta hace poco. Al contrario que en el otro caso mencionado, en esta ocasión debería haberme mantenido en la ignoracia.
Y eso que Terminator 3 tiene una premisa interesante. Bueno, premisa exactamente no es, porque lo primero que tenemos son unos 40 minutos de refrito de situaciones y escenas vistas en las dos entregas anteriores con una persecución de vehículos absurdamente demencial y magnificada.
En cuanto se calman un poco las cosas nos cuentan de qué va la movida (o de qué podría ir): el futuro no se ha evitado, sino que se ha aplazado y ahora Skynet ha enviado al pasado a un nuevo Terminator (con forma femenina) para eliminar, no a John Connor, sino a sus lugartenientes. Hubiera sido interesante ver cómo el protagonismo persecutorio de Connor se ve desplazado hacia unos secundarios o, por lo menos, como el objetivo de los protagonistas no es solo sobrevivir, sino localizar a estos tipos antes de que la Terminatrix se los cargue. Pero no, el guionista se da cuenta de que crear a tantos personajes es un rollo y que ni siquiera es capaz de escribir bien a los dos que tiene que manejar y la subtrama se olvida con la misma rapidez con la que aparece.
Terminator Movie Como Puedas
En definitiva, la cinta podría pasar perfectamente por una parodia de los hermanos Wayans, con una acumulación cansina de situaciones ridículas y un exceso de diálogo para Schwarzenegger, consistente en repetir todas las variaciones posibles de las frases que dijo en las dos partes previas.
Nick Stahl es una elección de casting desafortunada, pero el guión tampoco le da un papel que le permita lucirse. Claire Danes deambulaba por papeles secundarios o en películas menores, esperando que le dieran la oportunidad de destacar que se merece, lo que no llegó hasta 2011 con la serie Homeland. Kristanna Loken está tan impresionante como desaprovechada en su papel de antagonista.