En el Edo feudal del shogunato Tokugawa, Manji es un samurái que asesina a su señor por ser un corrupto, convirtiéndose así en ronin. Desde entonces huye, junto a su hermana pequeña, de todos los cazarrecompensas que buscan capturarle hasta que cae en una emboscada…
A mediados del siglo XIX, un periodista americano viaja a Japón para buscar a una prostituta a la que años atrás amó y abandonó. En su recorrido por diversos burdeles, llega a una fantasmal isla donde se encuentra con una deformada cortesana que espera su llegada para explicarle un cuento repleto de extrema crueldad y perversa venganza.
En el aula de un instituto japonés se desarrolla una peculiar partida de lo que por aquí conocemos como «el escondite inglés», con el aliciente de que a quien se mueve cuando se acaba la cancioncilla le revienta la cabeza en cientos de bolitas rojas. Cuando el juego termina, los supervivientes descubren que ha pasado lo mismo en el resto de aulas y que tienen que volver a participar en un nuevo desafío de mortales consecuencias para los perdedores.
Al final de la primera parte, decíamos que el Japón tras la Segunda Guerra Mundial tenía impuesto sobre su producción filmográfica un férreo control por parte de los aliados, lo cual dejó sumido en una crisis sin precedentes al Imperio del Sol Naciente…