El precio del poder (traducción libre de Scarface) es una nueva versión del clásico de Howard Hawks de 1932, dirigida con el estilo inconfundible de Brian De Palma (Carrie, Una familia de locos, Vestida para matar) y escrita con la incisiva crudeza de Oliver Stone (El expreso de medianoche, La mano, Manhattan Sur). Es mucho más que una simple película de gánsteres, es un profundo estudio sobre la ambición sin medida, la decadencia moral, la paranoia corrosiva y la brutalidad inherente al sueño americano cuando se persigue sin escrúpulos. Protagonizan Al Pacino (El padrino, Serpico, Tarde de perros), Steven Bauer (Reclutas novatas, Un amor inocente, Ladrón de pasiones), Michelle Pfeiffer (La maldición de la Reina Dragón, Esplendor en la hierba, Grease 2), Mary Elizabeth Mastrantonio (El rey de la comedia, El color del dinero, El asesino del calendario) y F. Murray Abraham (La pareja chiflada, Un investigador insólito, Amadeus).
Sinopsis de «El precio del poder»
Tony Montana es un inmigrante cubano frío e implacable que llega a Miami tras el éxodo del Mariel en busca de poder y riqueza a cualquier precio. Su transformación de lavaplatos a narcotraficante todopoderoso es brutal, incómoda y fascinante.
Todo por la napia
El precio del poder es una experiencia cinematográfica intensa y memorable. Es un retrato visceral de la ambición descontrolada y las devastadoras consecuencias del poder absoluto y la corrupción. La película se deleita en la estética de los años 80 en Miami, con sus colores neón, su pegadiza música pop de sintetizador y una atmósfera de decadencia y ostentación.
El ascenso meteórico de Tony Montana está marcado por la traición, la codicia y una creciente adicción a la cocaína que lo consume física y mentalmente. A medida que alcanza la cima, su paranoia se intensifica, destruyendo sus relaciones y sellando su inevitable caída.
Al Pacino entrega una de las actuaciones más icónicas y magnéticas de su carrera como este refugiado cubano que llega a Miami con nada y asciende despiadadamente en el mundo del narcotráfico. Un antihéroe complejo, que fascina y repele a partes iguales, con un torbellino de carisma, furia y una vulnerabilidad latente que emerge en los momentos más inesperados.
Michelle Pfeiffer, en uno de sus primeros papeles importantes, ofrece una interpretación elegante y melancólica como Elvira Hancock, la esposa trofeo de Montana que también está atrapada en un ciclo de adicción y aislamiento.
La violencia excesiva, el lenguaje explícito y su estética exagerada han generado polémica, pero también le han otorgado un estatus de culto, siendo una obra fundamental del cine de gánsteres de los años 80.