Tras la muerte de Li Mu Bai, Yu Shu Lien protege la Espada Celestial (también llamada el Destino Verde) de las garras del malvado señor de la guerra Hades Dai, el Loto del Oeste. Para ayudarle en su cometido cuenta con una joven discípula y a un grupo de valientes guerreros expertos en artes marciales, entre los que destaca un antiguo pretendiente, conocido como Lobo Silencioso.
El mañana nunca muere es superior a GoldenEye en muchos aspectos. Sigue con el acercamiento que tubo tanto éxito en películas anteriores: un look moderno con alta tecnología de los años 90 combinado con elementos tradicionales de los primeros clásicos incluyendo increibles chicas, enemigos y gadgets. La película parece cara y desde luego lo es, excedía los 100 millones de dólares, un récord para una película Bond pero un indicativo de la confianza del estudio en la franquicia y en Brosnan.
Pues hay novedades sí, resulta que la idea de realizar una precuela con dos títulos parece que ha sido desechada al fin. Ridley Scott -Alien (1979), Blade Runner (1981) o Gladiator (2000)– su director parece que tendrá bajo sus órdenes a la guapa Charlize Theron -En tierra de hombres (2005), Hancock (2008), La carretera (2009)-.
Desde ya hace un tiempo se venía rumoreando la posibilidad de que se hiciera o no la precuela de la saga Alien (1979-1997). En su momento, -hace un año cosa así- se puso en marcha la idea de hacer efectiva dicha precuela.