Por tus muertos, dirigida por Sayago Ayuso, es una comedia con toques musicales que rinde homenaje al rock de los 80 al tiempo que reflexiona sobre los sueños rotos y las aspiraciones no cumplidas. Protagonizan José Mota (García y García, De Caperucita a loba), Jorge Sanz (Clara no es nombre de mujer, La reina de España), Marta Belenguer (La última cena, Camera Café, la película), Carles Francino (Tengo ganas de ti, Pasaje al amanecer) y Emilio Linder (Plantados, Balas y katanas).
Sinopsis de «Por tus muertos»
"Metralla" fue un grupo de rock de finales de los 80 que consiguió un gran éxito con "Por tus muertos", su primer y único LP. Justo antes de alcanzar la gloria se disolvieron. Treinta años después, Miguel, uno de los componentes de la banda, recibe una oferta para dar un importante concierto con la condición de que reúna al grupo.
Los viejos rockeros nunca mueren
El principal problema que puede tener Por tus muertos es que no llega a ser exactamente lo que puedes esperar que sea. Es decir, no es una comedia gamberra y alocada sobre el mundo del rock urbano (no sale Santiago Segura, ¡bien! 😁), algo que se queda en el prólogo introductorio, donde aparecen varias figuras reconocidas del panorama musical nacional a modo de falso documental sobre el falso grupo Metralla. Además se trata de un musical. Sí, los personajes se ponen a cantar en momentos aleatorios para explicar sus emociones, con los figurantes haciendo coros y coreografías.
Superados ambos dos traumas (lo de las canciones es un shock la primera vez, sobre todo si no vas avisado), la peli no está mal. Al margen del tono humorístico, que también está presente, la historia tiene trasfondo muy serio, inclinándose hacia el drama personal y explorando aspectos como la nostalgia, la amistad y la lucha por mantener viva la ilusión. Se busca y se consigue de forma bastante acertada generar una sensación de nostalgia hacia aquellos que vivieron los años 80, tanto en música como en vestuario, estética y forma de hablar, ofreciendo también un contraste con esos mismos elementos en la actualidad.
Es destacable la labor de la dupla protagonista, que hacen gala de una gran química y de un cruce de diálogos ingeniosos (que no cómicos), gracias a los cuales se aligera una trama que en ocasiones se vuelve un poco densa. Por un lado, José Mota, alejado de sus papeles más humorísticos, demuestra su capacidad para construir un personaje quijostesco, con aires melancólicos y un pequeño toque de sarcasmo amargado. Por otro lado, Jorge Sanz, con un coprotagonista lleno de excesos, despiporre y sorpresas, sirve como contrapunto cómico y, a la vez, como la voz de la razón (demente, pero razonable 🤣)
La narración es un poco irregular, con secuencias que avanzan con energía frente a otras en los que la acción se estanca. El hecho de que la premisa inicial sobre la reconciliación del grupo se resuelva casi desde el principio hace que dé la impresión de que la trama va dando tumbos sin tener muy claro hacia dónde quiere dirigirse. La mezcla de géneros no es todo lo orgánica que debería y por momentos se nota artificial. Es la iteración entre los personajes lo que ayuda mucho a que estas oscilaciones no se hagan muy pesadas.
Me da una pereza que flipas… XDDD