Sinopsis
Cuatro adolescentes son absorbidos por un videojuego, en el que se convierten en avatares de personajes arquetípicos. Allí vivirán múltiples aventuras, al tiempo que buscan cómo salir de allí para volver a su mundo.
Fin de semana de diversión lúdico-festiva en el estupendo Cine-Teatro Salesianos de Vigo, la más mejor y asequible sala que tenemos en la ciudad, con la proyección de la nueva adaptación de Jumanji… ¡y con palomitas de regalo!
El club de los cinco en la selva
Jumanji es una de esas películas que últimamente son vilipendiadas desde el momento en el que son anunciadas por parte de la «Liga de la Nostalgia Ofendida». En mi caso, como me quitaron el carnet de socio del club «Yo Crecí en los 80 y Ahora soy un Llorica», no me suelen afectar demasiado estas cosas ^_^
Empezamos a partir del final abierto de la entrega anterior: La caja del juego está enterrada en una playa (aunque no en Francia… ¡error de continuidad! XD ). Un hombre la encuentra, la desentierra y se la lleva a su hijo, pero… ahora ya nadie juega a esas cosas de tablero (discrepo ligeramente, pero bueno…), así que el juego digievoluciona mágicamente a un cartucho de consola. Y ya estamos en el lío.
Después de un prólogo con demasiadas similitudes a El club de los cinco (1985) para ser casual, entramos en materia. Durante aproximadamente 100 minutos asistimos a una cinta de acción y aventura muy divertida y bien llevada, con una muy buena integración de las características videojueguiles dentro de la historia (fortalezas y debilidades de los personajes jugadores, misiones principales y misiones secundarias, interacción con personajes no jugadores…).
Hay varias referencias a la peli original (destaca especialmente la cabaña de Alan Parrish), pero esta secuela tiene la suficiente personalidad propia como para resultar disfrutable sin necesidad de conocer el material precedente.
Tiene mucha gracia que se haga una película cuyos protagonistas son personajes de videojuego, con una trama que avanza a ritmo de niveles y tópicos de videojuego, en un momento en el que en cualquier gran estreno estándar (blockbuster que lo llaman los entendidos), las escenas principales son secuencias cinemáticas de videojuego XD
El final vuelve a recuperar un poco el tono de El club de los cinco… pero, eh, a mí la nostalgia no me afecta XD