Esta película sirve para responder a dos preguntas fundamentales que seguramente se lleva haciendo cualquier zinéfilo desde hace unos años: Sí, se puede hacer una peli que no se base (expresamente) en algo ya existente; y sí, se pueden usar y reformular las reglas y tópicos de un género de forma que parezcan nuevas y diferentes. Se puede contar una historia de terror sin recurrir a la acumulación escalonada de gore y amputaciones sanguinolentas y sin reversionar o continuar con las andanzas de alguna de las viejas glorias.

Más tras el salto…

«It follows» es una cinta de terror con regusto clásico, con guiños y homenajes al género, pero que no se limita a hacer un copiapega sin más. Creo que merece mucho la pena descubrir la historia según se ve, así que no voy a entrar en detalles concretos, el que quiera saber más que vea el trailer o lea la sinopsis en otros sitios (ahí arriba solo he contado los primeros 5 minutos).

Los personajes están bien definidos, son sencillos, planos y víctimas potenciales, pero están lejos de ser los monigotes intercambiables de otras cintas. La mítica regla de no practicar sexo para sobrevivir deja de ser una broma recurrente y se convierte en el leitmotiv que desencadena la trama.

El ritmo es pausado, te absorve, genera tensión poco a poco, sin agobiar pero sin llegar a aburrir. La banda sonora ayuda mucho a crear ambiente y tensión, y no recurre en ningún momento al reconocible recurso facilón de toda pelicula de terror. La fotografía es espectacular y el uso de la cámara es magistral; una cosa es tener a una persona grabando a otras personas, y otra muy diferente es saber qué recursos visuales usar para contribuir a la narración, cómo generar sensaciones en el espectador o cómo hacer que su atención oscile entre una conversación en primer plano y lo que ocurre de fondo.

Ahora a esperar las secuelas que sobreexpondrán al monstruo y que intentarán dar origen y explicación a la «maldición»… sigh…

Recomendable para los amantes del género de terror que quieran comprobar cómo se puede partir de los clásicos para crear algo fresco y diferente.