Sinopsis
Cuando empiezan a desparecer niños en el pueblo de Derry (Maine), un pandilla de amigos lidia con sus mayores miedos al enfrentarse a un malvado payaso llamado Pennywise, cuya historia de asesinatos y violencia data de siglos.
Los responsables del Cine-Teatro Salesianos de Vigo introducen pequeños cambios en su cartelera, dedicando la última sesión de Sábado y Domingo a películas más para mayores, mientras siguen manteniendo las sesiones de tarde a cine familiar para todos los públicos. Cuanta más variedad y más para elegir, mejor para todos. Desde aquí les deseamos muchos éxitos con esta iniciativa. Este fin de semana han empezado con la nueva adaptación de IT, de Stephen King.
Una de cal y otra de arena
No soy muy dado a caer en comparaciones que, por otra parte, suelen ser odiosas, pero en este caso, con dos adaptaciones de obras míticas de King estrenadas con tan poca diferencia, es casi imposible no hacerlo. It consigue ser todo lo que La Torre Oscura ni llega a alcanzar. Una buena adaptación (con sus modificaciones más o menos justificables) y una película dinámica y entretenida.
La novela avanza mediante saltos en el tiempo. Mientras en el «presente» el grupo se reúne, van recordando lo que les pasó cuando eran niños y se enfrentaron a Pennywise por primera vez. Para la adaptación, se ha optado por narrar linealmente el «pasado», dejando el enfrentamiento final con el payaso para la continuación. Ya se verá cómo afecta eso a la historia pues casi toda la chicha, al menos en el libro, está en este primer encuentro.
El grupo de chavales está muy bien definido, todos tienen su importancia, su personalidad y sus características propias, aunque algunos son dejados muy de lado para centrarse en los tres o cuatro protagonistas. Algo normal, por otro lado. El ritmo es continuo y sabe generar tensión en todo momento, a pesar de la estridente música machacona de la banda sonora. Hacer que dos horas y pico se pasen en un suspiro es un gran mérito.
Sobresaliente la actuación de Bill Skarsgård como Pennywise, y realmente destacable el papel de Sophia Lillis como Beverly.
La ambientación ochentera es un poco descafeinada, quedándose en un par de referencias fugaces de fondo. Sobre todo si lo comparamos con otros productos nostálgicos que nos invaden hoy en día.
Como nota curiosa, lo que da más miedo de la película no es precisamente Pennywise, sino los adultos del pueblo de Derry. Todos y cada uno de ellos.