Seok-Woo es un ocupado gestor financiero que se ha divorciado recientemente. Aunque no tiene ganas de ver a su ex-mujer, ante la insistencia de su hija pequeña, que vive con él en Seul, ambos cogen el tren de alta velocidad hasta Busan para ir a visitarla como regalo de cumpleaños para la niña. El sencillo viaje se va a encontar con dificultades imprevistas.