Siempre que una película, independientemente del estilo, sufre algún tipo de censura, ocurren 3 cosas:

1. Se publicita de forma gratuita y universal.
2. Se suscita mayor interés en la población, incluyendo los que no tenían ningún interés en la película o no la conocían.
3. Se obliga al visionado ‘ilegal’ de la cinta.

En resumen, la censura no funciona. Saw 6 no fue una excepción.

En España decidieron clasificar la película como X, limitando su proyección exclusivamente a las salas con dicha clasificación, que son menos de 10 en todo el país (creo). No sólo protestó la distribuidora, porque iba a perder millones de euros, sino los propios fans (y los no fans) en contra de la censura y en mi caso, por no tener una sala X en mi ciudad. Bueno, aunque la hubiera creo que no entraría, porque me da un poco de asquete.

En fin, que al final se eliminó esa clasificación, pero con la misma eliminación, se recortaronlas escenas más fuertecillas para poder superar los baremos del censor y hale, a todos los cines sin mayor problema. Sin mayor problema más allá de estrenarla 1 año después de la fecha oficial… Y al final lo que recortaron no fueron más que 3 minutos para dejar contenta a la Ministra Sinde.

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