Por norma general no suelo apostar por el producto patrio. Hoy me trago mis palabras, porque El ministerio del tiempo, aunque tenga un nombre ridículo, es una serie muy prometedora.
De verdad, no he encontrado absolutamente nada sobre lo que pueda rajar. Bueno, hay muchas cosas en las que no me importaría asesorar o aportar mi granito de arena, como darle un punto más de ciencia ficción, añadir más comedia, etc.
Continúo tras el salto, con algún spoiler, así que antes de leer, si no has visto el episodio, dale un play y luego al botón de Leer más.