La segunda – y desgraciadamente la última – aparición de Timothy Dalton como James Bond, acabaría siendo una de las películas más controvertidas de la serie. Cabe reseñar que es la primera película que no posee el titulo de alguna novela o historia corta de Ian Fleming, aunque parte de su trama está basada en el cuento corto «El Extraño Hilebrand» del libro Solo para tus ojos y parte de la novela Vive y deja morir.
El calendario de rodaje de la película se había retrasado, ya que hubo que esperar a Dalton seis semanas para tomar el papel de James Bond puesto que tenía que finalizar el rodaje de la película Brenda Starr. Dalton aceptó el contrato por tres películas en un periodo de cinco años, siendo la única condición que puso a los productores que interpretaría a un 007 más recio y fiel al estilo de Ian Fleming.
Tras el éxito de la primera película de la era Dalton, los guionistas Richard Maibaum y Michael G. Wilson crearon una línea argumental en la que enviaban a Bond a una misión de venganza personal ya que se habían decidido a hacer de 007 un héroe mundano más real.
Casi todo el mundo estuvo en su día de acuerdo que este era un thriller superior, pero para muchos fans no resultó suficientemente ‘Bondiano’. A mi parecer sigue una pauta correcta y los fans que alegan eso pienso que son los mismos que consideran que Roger Moore es mejor 007 que Dalton, con lo que muestran que no se han leído los libros de Ian Fleming.
En la película los lugares eran ciertamente exóticos, no había escenarios extravagantes y el enemigo es, para muchos, un barón de la droga muy creíble, en vez de un poderoso megalomaníaco loco a lo que ya nos tenían acostumbrados en anteriores películas.Y a pesar de las críticas de que el 007 de Dalton se estaba alejando demasiado de sus raices cinematográficas, para muchos otros fans era el Bond mejor basado en las novelas, con lo que coincido totalmente. Esta película, Licencia para matar, es una de las mejores películas Bond, sobretodo teniendo en cuenta las películas de Moore de los últimos años. Aquí se regresa al estilo realista característico de los filmes Desde Rusia con amor y 007: Al Servicio Secreto de Su Majestad.
La película incluye un gran guión, cosa que personalmente agradezco. Un reparto excepcional, cosa que es muy de tener en cuenta. Y varias escenas de acción excelentes. Por ejemplo cuando Bond se infiltra en un barco, y en pocos segundos salta por la borda para sumergirse, enfrentarse a hombres rana, subirse a una avioneta y pelearse con su piloto en una lucha a muerte. Un ejemplo de una escena creíble rodada de forma soberbia – este escenario sólo puede parecer creíble en una película Bond, pero ha de rodarse correctamente para que no parezca una escena de ciencia-ficción. Todo el que haya leido sus novelas o visto sus películas (buenas o malas) lo sabe.
Otro punto a reseñar en su increíble éxito como película son los magníficos trailers. La persecución climática de los trailers es tan emocionante que seas o no amante de la saga DEBES ir a ver la película. La productora asociada Barbara Broccoli se ganó un gran respeto al supervisar la producción de esta ambiciosa y emocionante escena. El problema es que se estrenó en Verano (fué la única película Bond no estrenada en invierno) tenía que luchar contra las grandes películas del momento… Indiana Jones y la Última Cruzada, Arma letal 2, Batman, Cazafantasmas 2, o Star Trek V… Si bien Luego demostró ser una de las que más éxito y mayor recaudación tuvo en el mercado de alquiler y venta.
Licencia para matar es notable en otros muchos puntos. Por una parte, fueron las últimas apariciones del M de Robert Brown y la Moneypenny de Caroline Bliss. También sería la última película Bond de John Glen. Nadie ha dirigido tantas películas Bond hasta el momento. Además, este fue el último guión del guionista Richard Maibaum (murió poco después del estreno de la película). Licencia para matar también sería la última película en la que Cubby Broccoli actuaría en su tradicional papel de productor.
Por desgracia, el legado de las películas no parecía, a priori, tan bueno como el tiempo demostró luego. En esa época la MGM/UA se encontraba descocada bajo control de un polémico presidente cuya falta de visión de marketing para las películas era legendaria. Solo falte decir que en mitad de la campaña americana de la película se le ocurrió la magnífica idea de cambiarle el nombre, pasando a estrenarse en vez de Licencia Revocada al nombre que finalmente tuvo, Licencia para Matar. Como consecuencia de esa desastrosa decisión, por la gran competencia en taquilla y también por la débil campaña publicitaria, en América Licencia para matar se estrenó dando como resultado fue un desastroso resultado de las taquillas americanas (aunque si vemos los beneficios internacionales, fueron más impresionantes).
Finalmente, este cúmulo de despropósitos, el echarse la culpa unos a otros como niños acabó con una pelea por temas legales con MGM/UA. Nadie podía haberse dado cuenta en aquel momento- ¿Quién piensa cuando se pone a discutir?-, pero los aspectos legales pospondrían el estreno de cualquier otra película Bond por un periodo de seis años. Para entonces, cuando le ofrecieron el papel de Goldeneye a Timothy Dalton, éste había decidido dejar el papel que respetaba tanto para trabajar en otros proyectos. Les dió un buen portazo en las narices, pero como un señor (cosa que no les sentó demasiado bien ).
Para mí, el paso de Dalton por el papel de Bond, fue breve pero impresionante. Su salida, sencillamente como un señor. Puede decirse que la era Dalton realmente restauró a James Bond como figura de acción seria. No se puede pasar por alto su contribución a la serie y sobre todo, no se puede dejar de agradecer el acercamiento a las novelas.
En este caso John Barry estaba sometiéndose a cirugía de garganta. Así que la banda sonora de Licencia para matar, estuvo esta vez a cargo de Michael Kamen,quien a parte de escribir el tema principal, participó en la composición y la dirigió. Inicialmente Eric Clapton y Vic Flick se pidió a escribir e interpretar el tema musical de Licence to Kill. Sin embargo, no he conseguido saber por qué, esa propuesta se vino abajo y la canción la interpretó Gladys Knight . La canción (una de las más largas utilizadas en una película de Bond) fue compuesta por Narada Michael Walden, Jeffrey Cohen y Walter Afanasieff.
Fuentes: Archivo 007, Wikipedia, Filmaffinity y SensaCine
Coincidimos en eso!
Totalmente de acuerdo. Licencia para matar es claramente superior a la anterior, no muy buena, para mi gusto.
1) Una excelente secuencia precréditos, con Bond y Leiter cayendo del cielo, literalmente.
2) A Dalton se lo ve mucho más natural en su papel, que había sido un tanto rígido en la cinta anterior. Una pena que no hayamos podido verlo en una tercera película. Tengo la impresión de que a Ian Fleming le hubiera encantado Timothy Dalton como James Bond, incluso más que Connery. No sólo por su interpretación, sino además por su apariencia física.
3) Acá tenemos un villano digno de James Bond. Un actor que sólo necesita esbozar una sonrisa para que veamos la encarnación del mal. Sádico y cruel, tanto por la manera en que trata a las mujeres, como por la manera en que ejecuta a su enemigos o traidores.
4) Un acierto la participación de Q, ayudando a Bond cuando éste más lo necesitaba. Apareciéndose de improviso con su maletín cargado de gadgets, preocupado por Bond como un padre por su hijo. Uno hasta sospecha que M estaba involucrado en el plan de ayuda a Bond, aunque oficialmente hubiera tenido que suspenderlo del servicio.
5) Un enfrentamiento final entre James Bond y el villano, como debe terminar toda película de 007 que se precie de serlo.
Para mi gusto, una de las mejores películas de toda la saga.