No me ha gustado Boyhood. Hale, ya lo he dicho… Es la historia de un niñato repelente y egoista, que adora estar con su padre no menos egoista que él, mientras que su madre curra por 7, estudia por 12 y sufre por 27.

Sí, Linklater será un crack por concebir la película a rodar en 12 años. Más crack por rodar sólo en 39 días de esos 12 años. Los actores están bastante bien y ver cómo crecen y envejecen a cada plano es, cuando menos, curioso. Ahora bien, la película es una mierda, el guión es una caca y la historia es más aburrida que un gif animado.

La película no va del chaval, que consigue hacer todo lo que quiere: va al cole, va al insti, hace fotos y luego a la uni… Yuhu!

La película va de su madre, que mientras los hijos viven de puto lujo, ella tiene que vivir con 2 putos duros, aguantar a 2 maridos borrachos de mierda, mudarse 15 veces y terminar en un apartamento más pequeño que el arenero de mi gato.

Por esto creo que la película debería llamarse Motherhood y los ingratos.

Un poco más tras el salto. Quizá con algún spoiler, pero como es bastante predecible, pues… tú mismo.

Pero bueno, ahí está y hay que verla. Merece la pena por satisfacer la curiosidad de ver cómo los actores maduran, crecen y envejecen (el cambio de Ethan Hawke es brutal… pasa de chaval a señor en un cambio de escena), sólo por esto, ya merece especial atención, pero nada más, esto no lo hace una buena -ni mejor- película, sólo la hace más interesante.

Durante las casi 3 horas de peli (sí, concretamente 2h45m a los que sobran 2h) hay cosas, voy a decir, raras… Por ejemplo, una referencia a Star Wars muy oportuna, dado que ‘recientemente’ sabemos que habrá tercera trilogía. Casualidad o buena medición? ¿Grabarían la misma escena con varias franquicias diferentes y utilizaron la que mejor encajaba en la época del estreno de la película? Esto lo dejo a la imaginación del lector o espectador.

En fin, una película bastante aburrida y que para nada es merecedora de un premio a la mejor película. Eso sí, y es indiscutible, en cuanto a originalidad merece un 10. Aunque la historia falle, el concepto es impresionante.