Los británicos son unas personalidades bastante peculiares. Fuera de su gusto por encerrarse en su isla y procrear incestuosamente bajo su moneda y su desagradable e insalubre «fish & chips», son la segunda potencia en series televisivas de calidad, muy reñidos con los yankis y su gran volumen de producción audiovisual.
Dando por sentado que ya conocéis nuestra predilección por «Doctor Who», la serie de ficción más imaginativa de todos los tiempos, aquí van otras recomendaciones de las que posiblemente ya me/nos hayáis oído hablar.