Sinopsis de «Super Shark»
Una plataforma petrolífera de ultimísima tecnología utiliza una innovadora técnica para perforar en roca hasta el momento impenetrable, lo que causa la liberación accidental de una gigantesca criatura primigenia encerrada durante siglos.
Drill, baby, drill
Pues sí, Super Shark es la enésima película con tiburón prehistórico liberado por accidente… y además, por coincidencias de la vida, parece que nos ha tocado comentar todas este año O:)
La novedad en esta ocasión es que el escualo es invulnerable a las balas, puede arrastrarse por la arena usando las aletas y además es capaz de saltar decenas de metros sobre la superficie del mar. También cambia de tamaño de forma aleatoria, pero ese me parece que no es un superpoder buscado de forma intencional XD . La explicación que se da para todo esto es que después de pasarse millones de años encerrado en un espacio reducido en un estado cercano a la animación suspendida, el tiburón ha experimentado una «adaptación evolutiva», que en este caso debe entenderse como que se ha descargado un pack de actualizaciones desde la Shark Store después de la siesta.
La «trama central» es muy floja (tensión sexual soporífera entre los protagonistas, argumento de venganza y mensaje proecologista contra las malévolas compañías petrolíferas y la búsqueda de una forma de acabar con la criatura…), pero las subtramas son aún peores (el trío de los vigilantes de la playa, el concurso de bikinis…). ¿Las actuaciones, los diálogos y los efectos especiales? … emmm… siguiente pregunta…
Eso sí, el combate final es maravilloso. En serio. ¡¡Sale un tanque con patas!!
El responsable de esta joya, Fred Olen Ray, es uno de los directores (y guionista, y productor, y…) fetiches de Zinemaniacos, con una carrera tan prolífica en cantidad e imaginación como escasa en calidad. El día que nos planteemos dedicarle un Ziclo, nos dará para llenar el blog con reseñas durante más de medio año de diversión y despiporre.