Una película de acción más que recomendable para ver en cines, a la que he tenido el gustazo de asistir gracias a los colegas de Sensacine.

Te contamos por qué  tras el salto (sin spoilers)… 
Para empezar, podemos decir que la película estuvo muy bien, dejándose notar el enorme presupuesto con el que contaron los productores, lo que redunda en un despliegue audiovisual convincente e impactante.

Por otro lado, las típicas acciones heroicas llegan incluso en este caso a encajar dentro del conjunto de la película.

El reparto está francamente bien elegido y encaja en cada uno de sus papeles. Es digno de señalar la aparición estelar, pero fugaz, de Kylie Minogue, que personalmente nos gustó mucho, tanto por el personaje que representa, lejos de lo que nos tiene acostumbrados, como por su espléndida interpretación.

En cuanto a la trama argumental, se ha logrado un muy buen ritmo desde el punto de vista de una película de acción, donde se explica el motivo real por el cual se producen los terremotos de una manera sencilla y comprensible para el público, en unos tiempos en los que este tipo de sucesos están de rabiosa actualidad.

Encajar esta obra como una película de catástrofes creemos que sería limitarla un poco, ya que aporta algo mas que desastres naturales, muertes por doquier, ruido ensordecedor y toneladas de GFX…pero no vamos a spoilear.

Sólo diremos que San Andrés empieza con una escena de acción protagonizada por una adolescente en el coche de Papá sufriendo un incidente en una carretera de montaña al filo de un desfiladero…sólo para prepararnos el cuerpo, pasando luego pasa a introducirnos en  la trama familiar, para, casi de inmediato, llevarnos a descargar adrenalina sin parar.

El hecho es que esta película se ha hecho para que cada escena de acción supere a la anterior, hasta el punto de, quizás, pasarse. Repetimos que no queremos spoilear, pero es que hay situaciones que están en un límite con la ficción muy peligroso,donde se nota que querían rizar el rizo de la espectacularidad en pos de levantar del asiento al espectador… pero en nuestro fuero interno, nos quedamos con la sensación de que ya nos gustaba sin la necesidad de llevarlo «un poquito mas allá».

Recapitulando, así con todo, el film es una pasada, pero les hubiese quedado muchísimo mejor si se hubiesen cortado un pelo en la intensidad de algunas escenas. Al menos, esa es nuestra opinión y la principal pega que le vemos a toda la película, obviando los típicos tics de patriotismo «U-S-A» ya tan manidos.

Otra cosa que nos gustaría mencionar es la segunda trama (sí, por increíble que parezca, hay dos tramas) y es que en ella, podemos ver a Alexandra Daddario  en su papel de salvadora.

Es un caso extraño, el que acostumbra a ver una película de acción varonil, sabe que en un gran porcentaje, sino en su mayoría, el papel de héroe es para el hombre y el de la mujer es el de ser salvada y protegida…pero no en esta ocasión, ya que dicha trama secundaria nos encontramos a Blake en un papel de protectora y salvadora delante de un chico.

La película, a pesar de sus dos o tres cosillas, merece la pena, así que os recomendamos ir a verla al cine, esos efectos audiovisuales que tiene sólo se pueden disfrutar en su máximo esplendor en una sala bien acondicionada.

Os dejo el tráiler para abrir boca…