Si, como yo, no recuerdas al detalle los hechos pasados de la saga Phantasm, tranqui, porque los 3 primeros minutos de Phantasm Ravager sirven como previously para ponerte al día. Bien por Don Coscarelli.
Con sólo 4 minutos más ya sabemos que Reggie no está para bromas, y el retrasado roba-coches tampoco, pero más que nada porque está muerto. Esta euforia pro-Reggie se nos pasa pronto porque el amigo Coscarelli nos pega una patada a la sensibilidad con una posible «demencia de Reggie», pero como él mismo dice, quizá es sólo otro de sus trucos.
Y con esta pregunta parte la película, ¿realidad phantasmal o un sueño de Resines? Y con la duda, voy a pasar de narrar los hechos de la película; quien quiera que la vea.
A nivel fotográfico, efectista y musical, Phantasm Ravager apesta. Parece una producción Asylum o SyFy. Efectos que apestan a cromazo en cada frame. La historia/argumento/guión es bueno, continúa con la mediocridad global de la saga, es decir «pelis de mierda que tienen algo que engancha». Yo creo que actualmente la saga engancha más por lo que fue que por lo que es. No obstante, es cierto que la demencia citada anteriormente añade un punto de vista interesante, algo complicado siendo la quinta de la saga. Otro punto positivo para Coscarelli.
Realmente, el baile entre realidad y ficción de Reggie es lo mejor de la película, y quizá es lo que la aleja un poco de la mediocridad global. Está muy bien llevado.
Y volviendo al apartado técnico, aunque los efectos apestan, hay que mentar a la gigantesca bola… aunque no esté genialísimamente hecha, las escenas de destrucción son geniales.
En resumen: Phantasm V, Phantasm Ravager o «la última de la saga», como la queráis llamar, merece la pena.