Los orcos están listos para la batalla. Han abandonado las montañas en las que han permanecido durante miles de años y están dispuestos a sembrar el caos y la destrucción a su paso. El destino de la humanidad está en manos de un par de torpes rangers y una atractiva ecologista.
Esta película de tufillo independiente, con un director (James MacPherson) y actores desconocidos (Adam Johnson, Brad Johnson and Maclain Nelson), acaba de tenerme entretenido por una horita y poco.
Bien es cierto que no es ninguna maravilla de la dirección ni de la interpretación, pero quizás un 3,6 asignado en la extensa IMDB se le quede corta a esta película de acción/comedia sin grandes pretensiones. No es la obra más adecuada para desperdiciar una noche de sábado, pero sí que encajaría bien un domingo por la tarde, tomando unas birras con los colegas y haciendo tiempo para ver «Dog Soldiers» por la noche.
Ese aire independiente del que hablamos se va gastando poco a poco a medida que transcurre el metraje. Los orcos empiezan a estar cada vez más presentes y, acabando el día, empiezan los enfrentamientos. Es aquí donde la película empieza a sumar puntos para el que escribe: todo el conjunto se crece y nos enganchará a aquellos que tengamos el día de ver el Zine (nótese la Z) como simple entretenimiento.
Quizás también sea dónde el realizador más pague el pato: una demasiado extensa batalla final hace caer a la dirección en varios planos de horda tras horda que caen en la repetición innecesaria, buscando seguramente el jaleo de los videntes en un desparrame de palomitas y cerveza por el suelo del centro de reunión (en lo que se suceden los tiros que todo jugador de rol ha querido llevar a cabo más de una vez contra tamañas huestes).
No se le puede pedir a cualquiera que repita el final de «Honor, Plomo y Sangre», pero está bien intentarlo, ¿porqué no? Malo será que alguien no sepa valorarlo. De aquí al final no os espereis nada nuevo ni innovador, porque os aseguro que le repetireis a vuestros acompañantes eso de «esto es de…. aquello es de….». ¿He dicho «Dog Soldiers» anteriormente? ^^
En resumen: no estamos ante una obra de autor, desde luego, pero cambiad al actor principal por Bruce Campbell y, seguramente, la veais con buenos ojos. ¡Suerte!
El contenido etílico en su visionado es bastante importante… xD
Pues cuando se me pase el trancazo que tengo encima, habrá que pegarse un lingotazo para verla… 🙂
Bueno… habrá que verla!