Aún no recuperados por la muerte de Irvin Kershner y Leslie Nielsen, hemos recibido la noticia del fallecimiento por suicidio a la edad de 95 años del gran Mario Monicelli.
A muchos puede que no les suene el nombre sin más, pero si os menciono títulos como Rufufú (1958), La gran guerra (1959), Boccacio 70 (1962), La armada Brancaleone (1966), o Habitación para cuatro (1975) quizá os suene más.
Director eminentemente ligado al terreno de la comedia, tuvo como uno de sus actores fetiche al gran Totó -cómico italiano de ascendecia noble- con el que trabajaría en títulos como Totó busca piso (1949), Totó y el rey de Roma (1951), o Totó y las mujeres (1952).
Juntos formaron un tándem exitoso donde Mario dirigía y escribía y Totó interpretaba. Para mí siempre estará ligado a este actor debido a que gracias a mi padre descubrí las películas de este tándem que me han hecho y siguen haciendo reir sin parar.
Bajo su dirección han pasado grandes estrellas italianas como Vittorio Gassman, Marcelo Mastroianni, Ugo Tognazzi, Claudia Cardinale, Giancarlo Gianinni o Mónica Vitti entre otros muchos.
De forma esporádica también actuó delante de la cámara siendo su última aparición la película Bajo el sol de la Toscana (2004), cinta protagonizada por Diane Lane.
Al parecer el director y guionista estaba afectado de cáncer de próstata en fase terminal -al igual que su padre en su momento- y los últimos meses estaba casi ciego y con fuertes dolores, lo cual le llevó a tirarse desde la ventana de su habitación sita en la quinta planta del hospital donde estaba internado.
Desde aquí, nuestro más sentido pésame. D.E.P.
