Según parece, el remake de uno de los iconos del «género viril» (como dicen algunos por aquí) como es Commando (Mark L. Lester, 1985), ya tiene cara, y será uno de los personajes leñeros de los últimos años. Desde su repartición de estopa en Terminator Salvation (aka Los ciborg también tenemos alma – robando la idea medio a Angel y a Blade Runner), destrozando bichoñada y deidades varias en Furia de Titanes y dándose un paseito por la colorista Avatar… nos llega… Sam Worthington.