Círculo Cerrado (Full Circle) es una miniserie dirigida por Steven Soderbergh (Ocean’s Eleven, Contagio), inspirada en parte por Tengoku to jigoku (El infierno del odio), de Akira Kurosawa. Cuenta con un reparto coral en el que se destacan nombres como Claire Danes (Las horas, El caso Wells), Timothy Olyphant (La jungla 4.0, Érase una vez en… Hollywood), Zazie Beetz (Lucy in the Sky, Bullet Train) y Dennis Quaid (Pandorum, Movie 43).
Sinopsis de Círculo Cerrado
El fallido secuestro de un joven de clase alta en la ciudad de Nueva York desencadena una investigación policial que poco a poco va desentrañando una red de secretos y mentiras que conecta a diferentes personajes de diversos estratos sociales.
La cuadratura del círculo
Círculo Cerrado tiene una estructura narrativa curiosa, porque parece la típica comedia de enredo que se inicia con una confusión de identidades y según avanza la historia se va descubriendo que todo el mundo está relacionado de la manera más insospechada, sin embargo no busca causar gracia. Tampoco pretende ser un profundo drama lacrimógeno, aunque sí tiene algún momento bastante duro.
La trama se enreda en una intriga noir en torno a una maraña de secretos, planes y engaños con algún toque de elementos ocultistas. El resultado busca denunciar la diferencia de clases, la indiferencia social, la especulación turística en países pobres, la corrupción y, sobre todo, el precio (y el peso) de los secretos.
Los personajes están muy bien presentados, aparentando ser estereotipos vistos mil veces, pero con un desarrollo que les aporta múltiples capas y complejidad en base a esos secretos que han ido callando y que relacionan a unos con otros de maneras en principio impensables.
Steven Soderbergh, reconocido director de cine, pone su sello en la serie y muestra la crudeza de la realidad de una manera sutil e inteligente, sin caer en clichés o moralismos.
Kin promete más de lo que da. Promete una historia similar a la que podemos encontrar en las génesis de los superhéroes de cómics: niño encuentra artefacto que lo dota de gran poder, y con el cual desea vengar la muerte de su padre. Sin embargo aquí nos quedamos en una promesa vacía de toda intención.
Cuando lo primero que vemos en el propio cartel, y toda la publicidad que se le hizo a la película, es «de los productores de», ya deberíamos empezar a entender que lo que vamos a ver no le llega a la suela de los zapatos y «ponemos eso a ver si alguien pica».
Perseguidos por un criminal vengativo y una banda de soldados sobrenaturales, un exconvicto recién liberado y su hermano adolescente adoptado se ven obligados a escapar con un arma de origen misterioso que es su única protección.
Ese criminal vengativo que menciona la sinopsis de Kin no es menos que James Franco firmando la que posiblemente sea la peor actuación de su carrera. Es tan exagerado que supera el límite de la credibilidad. No a un nivel Kingpin, donde su gran tamaño no deja de ser una alegoría a su enorme poder e influencia, no, aquí estamos a un nivel de sobreactuación tal que parece de los que suspendieron primero de actuación en la academia de actores.
Daft Punk en horas bajas? No, son los «soldados sobrenaturales».
Los otros perseguidores, los soldados sobrenaturales, sí aportan una línea argumental interesante durante toda la película, en lo poco que aparecen, pero al igual que el conjunto de la película, es una promesa que se queda en nada. Hasta se muestra evidente y poco sorpresiva llegado su clímax. Una pena, porque esto sí daba para más.
Dennis Quaid, Zöe Kravitz y Miles Truitt son los únicos que, aparentemente, intentan soportar el peso de la película, pero lamentablemente se queda en un intento porque, evidentemente, la mierda pesa más que la ausencia de ella.
Todo lo interesante ocurre en los primeros minutos de la película. A partir de ahí es una caída libre con alguna bolsa de aire caliente que resulta reconfortante… mientras sigues cayendo.
Para matar el tiempo se puede aceptar, pero no es un buen ejemplo de película de ciencia ficción, o de acción, recomendable, pues es un quiero y no puedo de muchas cosas.
Pandorum nos cuenta una historia futura, pero bastante cercana a la realidad actual. Año 2174, nos hemos cargado el planeta y lo hemos hecho inhabitable, pero tenemos una flor en el culo tan grande gracias a la que hemos encontrado otra tierra, Tanis, de similares características a ciento y pico años de viaje.
Richard Matheson y Carl Gottlieb sobre una historia de Guerdon Trueblood
MÚSICA:
Alan Parker; Tema principal: John Williams
FOTOGRAFÍA:
James A. Contner
REPARTO:
Dennis Quaid, Bess Armstrong, Simon MacCorkindale, John Putch, Louis Gossett Jr., Lea Thompson, P.H. Moriarty, Dan Blasko
Sinopsis
Todo está a punto para la inauguración de «Mundo Marino», un gigantesco parque acuático con algunas atracciones instaladas bajo las aguas de un bello lago artificial que se comunica con el mar a través de un pequeño canal.
“Yours, Mine & Ours” o aquí en españa «Tuyos, míos y nuestros» Basada en la novela «Who Gets the Drumstick», de Helen Beardsley fue todo un éxito en su momento hasta el punto de ser candidata al Globo de Oro como mejor comedia del año, la idea era cómo vence el amor entre dos almas gemelas y con ello reunir a 18 niños y no morir en el intento, claro. Y aunque oficialmente no fue estrenada en España, es una buena película romántica para los sábados tarde.
Todo sucede cuando un oficial de la marina viudo padre de diez hijos, Frank Beardsley (Henry Fonda) se enamora de una enfermera, Helen North(Lucille Ball), viuda con ocho hijos.
Al principio ninguno de ellos quiere que el otro se entere del número de hijos que tienen ya que por experiencias anteriores saben que espantarán al otro. Aunque por el medio se mete un amigo de ambos el oficial Darrel Harrison (Van Johnson).
Finalmente se hace imposible mantener el secreto y ambos deciden que es una locura intentar continuar la relación. Intentan salir con otras personas, pero son almas gemelas y se acaban encontrando nuevamente y deciden ser amigos, pero poco tiempo después, Helen y Frank se acaban casando, formando una enorme familia que deberá enfrentarse a la vida diaria, los problemas y la logística que acarrea una familia de veinte miembros que además tienen el inconveniente de que ninguno de los hijos acepta al nuevo progenitor.
Todos van a vivir a una gran casa medio derruida, porque es lo que se pueden permitir, y en donde se dan cita numerosos problemas que alcanzan básicamente a los niños, los adolescentes y los mayores. La casa es un caos, los niños están celosos entre ellos, odian a las respectivas parejas de sus padres, los adolescentes tienen problemas con los compañeros del insituto, todo parece un caos y para colmo la típica adolescente con novio «adicto al sexo» que la presiona para «hacer cosillas» y que llora cada cinco escenas…
La situación cambia cuando al pequeño Tommy (North) le pegan en el colegio por enfentarse a una monja que no le permite apellidarse Beardsley como sus nuevos hermanos… los padres empiezan un proceso de adopción cruzado que disgusta a todos los adolescentes y se combina con la marcha del padre, Frank Berdsley, a la mar para probar un revolucionario sistema de aterrizaje en portaviones inventado por él.
Frank se marcha dejando a todos al cuidado de Helen sin saber que ésta está embarazada. los 18 hijos lo saben, pero ella les pide que no le digan nada a su padre para que se pueda marchar a cumplir su sueño. Todos hacen una especie de «pacto de silencio».
Todo va bien hasta que la hija pequeña le envía un dibujo a su padre indicándole que dentro de Helen hay un bebé, como nadie le cuenta nada Frank escapa en un avión de correos para ver a su mujer y la encuentra embarazadísima rodeada por todos los niños, al tiempo encuentra que su hijo mayor se ha alistado en la marina en vez de marchar a la universidad.
La película concluye con Helen saliendo del hospital rodeada de los 18 niños.
Lucille Ball y Henry Fonda
Protagonizada por la cómica Lucille Ball y Henry Fonda, vista hoy en día parece algo machista y retrógada. La película trabaja los valores familiares y fomenta el romanticismo, aunque tiene una visión poco menos que cuestionable acerca del uso de anticonceptivos, y de la «colaboracion familiar» ya que aunque los hombres «ayudan» en las tareas domésticas, realmente a lo largo de la película son las mujeres las que elaboran la carga de la casa…
A pesar de todo ello, en el 2005 se estrenó su vomitivo remake oficial, “Yours, Mine and Ours”, con Dennis Quaid y Rene Russo de pareja principal. Y que ya que estoy, no es que quiera ser mala pero hay que echarle imaginación para suponer que son la misma historia porque para eso también podemos considerar que la película «Doce en Casa» del 2003 y protagonizada por Steve Martin y Bonnie Hunt también es un remake…