TÍTULO | Copycat (Copia mortal) | ||
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AÑO | 1995 | NACIONALIDAD | USA |
DIRECTOR | Jon Amiel | ||
GUIÓN | Ann Biderman, David Madsen | ||
REPARTO | Sigourney Weaver, Holly Hunter, Dermot Mulroney, William McNamara | ||
SINOPSIS | La psicóloga Helen Hudson es especialista en asesinos en serie. Desentrañar las mentes de sus pacientes es un trabajo peligroso, tanto que uno de ellos está a punto de matarla. Ahora sufre de agorafobia y vive recluida en su apartamento con el temor de volver a escuchar la voz amenazante de un psicópata. |
Hace poco se cumplió el vigésimo aniversario de Copycat, así que una buena forma de celebrarlo era verla y hacerle una pequeña review.
Siempre es un placer ver una buena película y siempre da gustito ver a Sigourney Weaver, así que Copycat tenía que ser una buena opción para pasar la tarde. Lo fue.
Continúo tras el salto.
Copycat es una película fantástica, cojonuda, que mantiene el ritmo de manera brillante, y con una tensión ambiental creada por el personaje de Sigourney Weaver que pocas otras películas han sabido recrear (quizá Atracción diabólica, de George A. Romero podría ser un ejemplo).
Tenemos todos los ingredientes para una película de 10, sin embargo en la mayoría de sites donde puntúan apenas llega al 7 en el mejor de los casos. Ojo, esta es una muy buena nota, teniendo en cuenta la cantidad de miles de imbéciles (yo! presente!) votando por chorradas que hay en la red; El silencio de los corderos, de 1991, otra obra maestra del thriller policíaco con asesino en serie llega casi al 9; o Seven, estrenada el mismo 1995, también alcanza el 9, eclipsando a Copycat de forma que casi la destierra al olvido… Y a qué debemos esta diferencia? Pues yo lo achacaría al recién acuñado ‘efecto Kylo’: un malo sin carisma.
Un antagonista que no llame la atención del espectador se puede cargar la película. Aquí no sé muy bien si es culpa del personaje o directamente del actor, o quizá desde un punto más subjetivo podemos achacarlo a su, por momentos, desagradable parecido con Tom Cruise (esto puede ser algo más personal).
Por un lado el malo, falto de carisma, y por otro el acelerado final… Tenemos una película de 2 horas de duración y en los primeros 90 minutos apenas tenemos 2 o 3 muertes, y para el final aceleramos todo para que termine como queremos que termine.
A ver, me habéis estado preparando durante 2 horas de thriller tranqui, con ritmo constante y racionamiento correcto de sangre y muertes… acelerar todo al final es un error. Y cuidado! es un error doble, porque me aceleras la llegada del fin, pero cuando llega el clímax, me matas de aburrimiento con planos largos, cámaras lentas, persecuciones absurdas… en fin, un pequeño chasco.
Ojo, tan sólo he dicho un par de cositas malas que tiene la peli, pero que tienen, dependiendo de la persona que observa, más o menos peso. No vamos a mencionar las licencias ‘hacker’ que se toman en la película, porque hace 20 años éramos más inocentes y no teníamos ni p*** idea de lo que estaban haciendo.
Como cosas buenas, Sigourney está que se sale, y eclipsa al resto del reparto, de los que apenas recuerdas el nombre o cara. La historia está muy guay: un asesino en serie que imita los crímenes de otros asesinos en serie y la carrera para detenerlo. El guión y dirección están más que correctos y consiguen que todo funcione coherentemente. Hasta tenemos un imitador de Nicolas Cage por el medio!
Copycat, como comencé diciendo, es un thriller cojonudo, y merece la pena verla, o volver a verla.