Hellraiser: Deader, la séptima de la saga Hellraiser no iba a arreglar nada que hubieran destrozado las 2 anteriores, no… pero al menos mantiene la línea; una línea que se aleja del gore/terror para acercarse más al suspense/intriga y malrollismo, medianamente bien ejecutado.

El cadenismo cenobita, que en entregas anteriores se hizo de rogar hasta llegado el final de las películas, aquí sólo nos mantiene en espera 26 minutos (de 88), aunque todo apunta -o no- a ser un sueño (premonitorio?).

Sin entrar en demasiados detalles, la película vuelve a suponer un bajón cualitativo en cuanto al terror que un día esperamos. Un bajón que se hace menos evidente comparando con las 2 anteriores, que ya se apartaban del hellraiserismo inicial para contarnos otras historias paralelas del universo de Clive Barker. En lugar de un policía atormentado, o un currele de cubículo, aquí tenemos a una periodista, pero el resto de la historia casi se repite con las anteriores… VHS cutre, visiones paranoides, pistas, investigación…

La periodista lleva la investigación hasta el punto en que ya no puede salir de ella, y pasa lo obvio… Piiiiiiiinhead!

No  voy a revelar nada más, por si te pica la curiosidad de verla… aunque la verdad es que es tan mala que no me apetece perder el tiempo escribiendo más sobre ella… :S

Te dejo el tráiler y decides…

Spoilers: la escena del cuarto de baño con el cuchillo clavado en la espalda es digno de estudio.