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«Yo, el Halcón» (1986) – yo para ser feliz quiero un camión

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TÍTULO ORIGINAL  Over the Top
AÑO  1986
NACIONALIDAD  USA
DIRECTOR  Menahem Golan
GUIÓN  Stirling Silliphant & Sylvester Stallone
MÚSICA  Giorgio Moroder
FOTOGRAFÍA  David Gurfinkel
REPARTO  Sylvester Stallone, David Mendenhall, Robert Loggia, Susan Blakely, Rick Zumwalt, Chris McCarthy
SINOPSIS  Lincoln Hawk es un camionero que lo único que desea es estar con su hijo. Cuando lo abandonó doce años antes, el niño pasó a estar bajo la custodia de su madre. Ahora debe participar en luchas para recuperar el amor de su hijo, que está en una academia militar.

Nos encontramos con una de las míticas películas de la humilde productora Cannon Group, la cual, si sois seguidores de Zinemaníacos, habréis leido de mi compañero Pelosfx su interesante post sobre la misma, por lo tanto me ahorro letras en comentarla.

Partiendo de la base que no es una gran película, y menos aún una de las mejores de Stallone, comenzaremos la crítica a este film como lo que es, una película tremendamente taquillera en su momento que obtuvo gran popularidad en los videoclubs, ésta película se convirtió en muy poco tiempo, misteriosamente, en un icono de los 80 que hizo que muchos hombres, adolescentes y niños se dedicasen a echar pulsos en cada momento libre que se les presentaba. Y los que sean de esa época saben que es así.

La historia es la de siempre, hombre trabajador honrado (aquí un camionero) busca la custodia de su hijo, que lo tiene el poderoso suegro de turno, como siempre rico.  El honrado camionero debe conseguir dinero para pagar un abogado y conseguir la custodia de su hijo y también conseguir que su hijo quiera vivir con él… Consigue que le dejen un verano la custodia del crío, que es un repelente, pero al final acaban haciéndose «compis» de viaje.

La tensión se masca en cada torneo, y cómo no,  el «escuálido» Stallone debe enfrentarse a las bestias pardas que también participan en el concurso, llegue a la final y pueda conseguir el suculento premio que allí se ofrece y pagar un buen abogado que le garantice la custodia de su hijo, y de paso, ganarse el respeto de su hijo y su suegro.

Que vamos, que si no es porque sale Stallone, podría fácilmente pasar por uno de los telefilmes baratos dramáticos de tarde en A3.

De acuerdo, le falta algo de acción y  ¿Cómo demonios dársela? las peleas de boxeo están muy vistas, las carreras de coches también, además así no se podrá enfrentar a bestias pardas… ¿qué hacemos?… pues algo nunca visto en cine anteriormente… ¡un concurso de pulsos!. ¿A que la idea es original? en principio el argumento puede sonar a mierda, pero con lo de los pulsos gana un punto de interés ¿a que si?.

Todo el que sea aficionado a películas de acción varonil no puede evitar interesarse por este sorprendente argumento…. El caso es… que queda un poco decepcionado al encontrarse con una pastelada de este calibre. Si esta película se escribiese hoy, juraríamos que los guionistas esnifaron algo…(ah, no, que sí se ha escrito… Acero Puro tiene un guión similar…), pero en los 80, a parte de que se daba por sentado de que los guionistas esnifaban, se permitían emitir cualquier bazofia siempre que garantizase los cuatro duros que hubiese costado producirla. Y con lo fuerte que daba en taquillas Stallone, eso estaba garantizado.

Bueno, ahí os dejo el trailer para abrir boca y os animéis a echar un pulso con la película…

Fuentes: GoogleWikipedia Filmaffinity y SensaCine

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