Tormenta Oscura es una película de ciencia ficción catastrofista dirigida por Jason Bourque, responsable de diversos telefilms sobre dramas familiares, apocalipsis o conflictos navideños varios (en la variedad está el gusto). Protagoniza de forma inexpresiva Stephen Baldwin, el hermano del clan Baldwin habitual en este tipo de cintas; también andan por ahí Rob Labelle (habitual secundario en innumerables series como Los 4400 o Smallville) y William B. Davis (el Fumador de Expendiente-X).
En una base militar secreta, un equipo científico acaba de inventar el Eruptor, un arma capaz de reducir cualquier cuerpo a cenizas inyectándole materia oscura a presión.
La cinta nos cuenta una historia de origen de un superhéroe completamente típica. No se han roto mucho los cuernos: científico trabaja en experimento para utilizar la materia oscura; la financiación militar quiere resultados y se aceleran las pruebas cometiendo imprudencias; por un lado, el científico se ve expuesto a la materia oscura y adquiere habilidades sobrehumanas y por otro lado, un accidente en el laboratorio provoca un incidente que podría causar el fin de la existencia tal como la conocemos.
Un chico entra en un bar con un caniche blanco debajo de un brazo y materia oscura debajo del otro y le dice al camarero…
No, no tiene ninguna gracia.
Y no queda mucho más que añadir. Efectos bastante justitos, tecnocháchara bochornosa, actuaciones muy limitadas y situaciones navegando alegremente entre lo ridículo y lo absurdo. El desarrollo es bastante lineal y sin sorpresas ni giros inesperados.
Una peli muy adecuada para acompañar la siesta o mientras sales a dar un paseo.
Trailer de Tormenta Oscura
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