Black Mass es un coñazo de película. Muy pocos momentos elevan su tensión o interés por encima del psé, y se podrían identificar como el 1% de la película, ¿el resto? Un coñazo monumental.
Aburrida, lenta, parada y falsa.
¿Falsa?
No tiene nada que ver con que los hechos de Black Mass tengan o no que ver con una historia real (libros, novelas, biografías, etc), sino por la impostación de gran parte de los personajes. El maquillaje extremo de muchos tampoco ayuda a quitar esa sensación de falsedad que puebla la película.
A ver, si tanto necesitan maquillar a las estrellas para que ‘se parezcan’ a la gente a la que interpretan, quizá no sean los más adecuados para hacer el papel.
Pero no sólo Johnny Depp sufrió este maquillaje, Jesse Plemons, Joel Edgerton y Benedict Cumberbatch también salieron del rodaje de Black Mass apestado a látex.
Los encargados del casting son unos putos paquetes, y los de maquillaje otros. No obstante supongo, quiero suponer, que la culpa de todo esto la tiene el propio Johnny Depp, que se empeñaría en interpretar al personaje (quizá porque nunca hizo de mafioso) y tuvieron que hacer malabares para que fuera más fiel a la realidad, con todo lo innecesario que ello conlleva. Nadie conoce al personaje, puedes ponerle la cara de Mickey Mouse porque no va a importar, lo que va a ser necesario es que actúe como tiene que actuar, independientemente de la cara que tenga.
¿Aburrida?
No hay nada, nada, en Black Mass que me haya llamado la atención o me haya provocado algún sobresalto de «oh, por fin!», no todo lo contrario. Tedio sobre tedio, y de postre más tedio. Y mira que me gustan las películas de mafias, policíacas y de suspense, pero aquí no hay nada de nada.
La peli va del mafias que hace mafias, pero de tranqui, y al final lo pillan. Realmente la peli va de todo lo que hace el FBI para no pillarlo y después para sí pillarlo. Pero todo contado con el mayor de los aburrimientos.
Es como si hiciéramos una película del sastre que le hacía los trajes al vecino del abogado que pilló a Capone por delitos fiscales.
Nada, que Black Mass no me ha convencido en absoluto, en ningún aspecto. No la puedo recomendar.