Bueno, quizá ‘increíble’ resulta un poco capcioso, pero desde luego, mi sabor de boca después del doble episodio crossover no podría ser mejor.
He tardado unos días más de la cuenta en verlos, por motivos familiares; las fechas obligan a ello, pero bueno, aquí estamos.
Continuamos tras el salto, sin spoilers. Bueno, mejor con spoilers. Pocos, pero algunos.
La primera parte del crossover, emitida en el episodio de The Flash, transcurre en Central City, y nos lleva a Arrow yendo tras un malo a la ciudad de Barry Allen y a pedirle ayuda al corredor con un poco de reticencia…
Antes de ir tras el malo, viene una corta sesión de entrenamiento, divertida, y es una pena que no fuera un poco más larga, porque fue un momento realmente divertido. El entrenamiento era necesario, porque Barry era rápido, pero inexperto, y Oliver le dejó las cosas claritas. La experiencia es un grado.
El malo malote era un meta-humano que ‘contagiaba’ la rabia a quien intercambiaba miradas con él, así que, cómo no, Barry se contagia y poco a poco se va poniendo colorao’ y le entra la mala hostia, y claro… empieza a soltar mierda por esa boquita de piñón y termina a leches con Oliver. Al final lo curan poniéndole luces de colores (tal cual).
El de la silla de ruedas descubre quién se esconde tras la capucha verde y se lo cuenta a todo el equipo (bravo), así que su identidad secreta se queda un poco en pelotas. No pasa nada, son todos colegas. No?
El cambio a Arrow es un poco más oscuro, como la serie. Ésta empezó siendo un poco paraíso del pijerío, y medio culebrón de guapos y guapas… por suerte cambió rápido, y hoy es más Batman que Melrose Place.
El equipo de The Flash llega a Starling City para darle unos recados a Felicity y para ver ‘la cueva’ de Arrow. Entre medias aparece otro malo y los héroes vuelven a hacer equipo para ir tras él. Un ex del Escuadrón Suicida, de Argus, es el enemigo en esta ocasión, así que todos tienen que aliarse para intentar detenerlo.
El vs en este episodio viene cuando Barry conoce en primera persona los métodos de Oliver para obtener la información de los malotes… tortura light. Parece que no le mola mucho, pero en medio minuto lo acepta como natural… Más o menos como cuando Anakin se convierte en Darth Vader.
Palpatine: Ahora eres malo.
Anakin: No quiero.
Palpatine: Que sí…
Anakin: Bueno, vale.
Palpatine: Ahora serás Lord Vader.
Vader: Ok, maestro.
Así, sin más.
Detienen al malo, se toman unos cafés para celebrarlo y tan amigos hasta el siguiente crossover.
Realmente lo disfruté como un enano. Si una serie de superhéroes me gusta, y 2 me gustan más; cuando se mezclan ambos, es el acabose! Deseo que empiece pronto la serie de Supergirl para tener a la segunda línea de la JLA en la pantalla pequeña (que cada vez se va haciendo más y más grande).
Pd: En el segundo episodio, es la primera vez en todo Arrow que Oliver se refiere a Roy como ‘Speedy’ en lugar de a su hermana. Como nota, indicar que en los cómics, Speedy siempre fue Roy… en Arrow se inventaron que Speedy era Thea… hasta hoy.