Nombre: Patrick Bateman
Película: American Psycho (2000)
Biografía: Este es uno de mis psycho killers preferidos. Nos encontramos al que sin duda es el más nihilista, elegante, ególatra, y elitista psycho killer que nos ha dado el mundo del celuloide; el yuppie Patrick Bateman. Este demente vivía en un mundo donde absolutamente todo lo tenía al alcance de la mano. Criado en una familia adinerada, rodeado de un ambiente selecto y desconectado totalmente de la dura realidad de las clases media – baja del mundo actual, pasaba sus días en su despacho ejerciendo de vice presidente de una multinacional.
El ambiente que imbuye a este personaje no hace sino revelarnos su frialdad, su desdén y su despotismo hacia los demás -incluso en su propio, reducido y selecto círculo social-. Asimismo nos deja entrever un mundo totalmente artificial donde impera el «tanto tienes, tanto vales» y donde la envidia es compañera de mesa ya sea en el trabajo o fuera de él.
Viviendo en un piso de lujo y frecuentando los clubes y restaurantes más exclusivos de la ciudad de Nueva York, el maníaco de Bateman se encontrará poco a poco entrando en una espiral de violencia, sangre y asesinatos donde participarán y padecerán en sus orgías personas de toda índole desde vagabundos y prostitutas hasta compañeros de trabajo.
Este psycho killer representa la dualidad tan brutal de un individuo que se transforma. Durante el día tenemos al prototipo de yuppie, el ejecutivo triunfador que se relaciona en su selecto ámbito social donde gastar 600 dólares en un almuerzo y pagar con una tarjeta platino es un ritual obligatorio. Al mismo tiempo, se nos muestra como el antecesor del hombre metrosexual que impera en la entrada del nuevo milenio con un par de décadas de adelanto -la película está ambientada al igual que la novela en los años 80- donde incluso al inicio de la cinta nos indica su rutina diaria y metódica en la que no falta el gel con espuma activada por agua, crema hidratante para la cara, el after shave sin alcohol o la máscara de hielo que guarda en la nevera para evitar los ojos hinchados.
Sin embargo la otra cara aunque nos muestra una persona tan fría y metódica e indiferente como su «personaje público» también nos muestra sus noches en las que da rienda suelta a sus instintos homicidas y a sus bacanales de sangre llegando en algún caso al canibalismo -aunque pasen de puntillas sobre este hecho en la película que nos ocupa, la novela se muestra mucho más atrozmente-.
Best Weapon: Sin duda su sangre fría y su elegancia con las que podía atraer a sus futuras víctimas encandilándolas con su poder y posición. También cabe destacar sus herramientas más habituales como son hachas, sierras mecánicas o pistolas.
Tendencia Psicótica: Principalmente lo que le pidiera en el momento el cuerpo, desde compañeros de trabajo a los cuales tenía una envidia atroz con los que disfrutar partiendo la cabeza con su hacha, pasando por mendigos totalmente desconocidos a los que apuñala en plena calle, o prostitutas con las que jugar con su sierra eléctrica, antiguas amigas a las que muerde en pleno acto sexual o policías a los que dispara cuando lo persiguen…todo vale.
Escenas memorables: Muchas pero destacamos entre otras, al principio de la cinta cuando se quita del rostro una mascarilla facial dejando al descubierto su cara como representación de su yo interior, hasta el momento en que mientras analiza el tema «Hip to be square» de Huey Lewis and the news se va enfundado un anorak de plástico previamente a cometer uno de sus crímenes, o la escena donde totalmente desnudo y sierra eléctrica en mano persigue a una prostituta.
Hábitat natural: Desde su despacho donde recrea sus asesinatos en su libreta, pasando por sus restaurantes favoritos como el Dorsia o el Barcadia, siguiendo con apartamentos -ya sea donde reside habitualmente o el de otros- descansillos de edificios donde puede practicar incluso el noble arte del lanzamiento de sierra eléctrica.
Os dejo con el trailer de esta cinta, disfrutad!!!