De todas las historias la que más me ha impactado es La del hospital; angustia en estado puro con toques de gore quirúrgico.
Sin ser una novedad, Southbound es una historia de historias, al estilo Creepshow o la un poco más reciente Four Rooms. 5 historias con un nexo en común.
Terror, gore light, suspense y bastante ambiente malrollesco de ese que hace que te mantengas inquieto, pero con el punto a favor de que no eres capaz de apartar la mirada de la pantalla.
Uno de los nexos en común que puedo mencionar, sin entrar en spoilers, es el presentador/narrador del inicio de cada historia. En Southbound lo ponen como un presentador de una emisora de radio y queda bastante guay. A diferencia de Historias de la cripta, aquí el presentador forma parte activa en la historia y no la presenta desde fuera.
No puedo decir más sobre Southbound, salvo que si os fiáis de mi palabra, no dejéis de ver esta película. Lo dicho, no es original, ni llena de grandes efectos, ni litros de sangre por doquier, pero está muy bien hecha, entretiene un huevo y no te dejará indiferente.
Aún me queda algo de mal rollo en el cuerpo después de ver la peli…