Bueno, hoy traemos a «estudio» esta película de 1980, primera adaptación al cine del personaje Popeye, dirigida por Robert Altman y protagonizada por Robin Williams como Popeye y Shelley Duvall como Olivia.
En resumen: esta película es infumable, tanto por la historia, diálogos, interpretaciones, etc… Aunque lo peor son las «cancioncillas» que maldecoran la película cada 5 minutos. Ya la primera patada viene en el minuto 2, con la cancioncilla «del pueblo»… las hostias son constantes y consistentes así como avanza la película.
No sé qué clase de drogas se había metido Robert Altman en 1980 como para pensar en dirigir una película como esta, pero creo que estaban caducadas… El mismo Robert Altman que tan sólo 10 años antes había dirigido una obra como M.A.S.H. que no diré que es una obra maestra, pero sí dista años luz en calidad, a todos los niveles, de una mierda como la presente.
Analizando la película a nivel técnico, la película tendría un aprobado seguro; la fotografía es buena y los planos y transiciones son correctos. Pero es el único aspecto donde tendría un aprobado. IMDB le otorga un 4.7 sobre 10, pero me parece una puntuación demasiado generosa. Yo no le doy más de un 3 en general.
En fin, si queréis pasar un mal rato, aburrido y con canciones horrendas, es una opción a tener en cuenta: