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Invasores de Marte (1986), terror desde el espacio exterior

Invasores de Marte 01
TÍTULO ORIGINAL:
Invaders From Mars
NACIONALIDAD:
Estados Unidos
AÑO:
1986
DURACIÓN:
99 min.
DIRECTOR:
Tobe Hooper
GUIÓN:
Dan O’Bannon, Don Jakoby, Richard Blake
MÚSICA:
Christopher Young
FOTOGRAFÍA:
Daniel Pearl
REPARTO:
Hunter Carson, Karen Black, Louise Fletcher, Timothy Bottoms, Laraine Newman, James Karen, Eric Pierpoint, Christopher Allport, Donald Hotton, William Bassett, Charlie Dell, Bud Cort, Kenneth Kimmins, Jimmy Hunt, Virginya Keehne, Dale Dye, Chris Hebert, William Frankfather, Joseph Brutsman, Debra Berger, Mason Nupuf, Eddy Donno, Eric Norris, Michael McGrady, Larry Poindexter, Debbie Lee Carrington

Sinopsis de «Invasores de Marte»

Una noche de tormenta, un niño, David Gardner, ve aterrizar una nave espacial en la Colina del Cobre, pero nadie le creerá. A partir de entonces, todo el que visita ese lugar regresa con una misteriosa señal en la nuca y un comportamiento extraño. Los padres de David son las primeras víctimas, pero también otros vecinos del pueblo sufrirán los mismos efectos.

Venimos en son de paz

Invasores de Marte es un más que correcto remake de una película del mismo título estrenada en 1953, algo que no resulta sorprendente si tenemos en cuenta que está dirigida por Tobe Hooper (La matanza de Texas (1974), El misterio de Salem’s Lot (1979), Poltergeist (1982), Lifeforce (1985),…), cuenta con guión de Dan O’Bannon (Alien (1979), Lifeforce (1985),…) y tiene a Stan Winston (La Cosa (1982), Terminator (1984), Aliens (1986) ,…) como responsable de efectos especiales y animatrónicos. -Sí, hoy no me apetece escribir y por eso estoy enciclopédico vomitando datos- ‘:)

A partir de una historia de suplantación mil veces vista, la cinta combina hábilmente elementos de la serie B de los 50 (la paranoia y el miedo a lo extraño) con características de la serie B de los 80 (monstruos horribles y un poco horteras) y añade unas pequeñas dosis de intriga, terror y suspense. El desarrollo desde el punto de vista del chaval protagonista la convierte casi en una versión raruna de las típicas películas de aventuras ochenteras con niños haciendo el gamba, ya sea buscando tesoros, o escondiendo mascotas alienígenas perdidas…

El final es una mezcla entre pesadilla y alucinación, y casi sería un Resines en toda regla, sino fuera porque juega con la ambiguedad de si todo lo que ha pasado fue realmente un sueño o una premonición.

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