Grabbers es una locura. No tanto como Guns Akimbo, de la que hablamos aquí hace poquito; Grabbers es mucho más tranqui. Mucho más película y no videoclip, pero la falta de dinámica (o diferencia entre dinámicas) no le resta visibilidad.
John Wright, quien en 2009 dirigió “Tormented”, una película de terror con tintes de comedia, vuelve ahora con todo lo contrario, una comedia con tintes de terror…
Me recuerda mucho a Surgió del fondo del mar, o Tentáculos, por aquello de los pulpos, pero más allá de esa pobre comparación, es una peli de bichoños para partirse el ojete… La mayoría de pelis de bichoños son de risa, pero de lo malas que resultan; ésta no.
Grabbers nos sitúa en la Isla de Erin, una islita en la costa irlandesa, donde lo único que puedes hacer para pasar el tiempo es ver cómo crece un árbol o emborracharte. Cerca del puerto cae un meteorito, que resulta ser un cargamento de huevos alienígenas… y su mamá.
Hilarante y otro ejemplo de película que no se tiene en serio a sí misma, y sólo así consigue ser visible. No es una mierda de La Sexta de la sobremesa de un sábado, no; aquí hay guión, aquí hay dirección, buenos actores (desconocidos en su mayoría, salvo Richard Coyle, a quien conocemos por ser Faustus Blackwood en Las escalofriantes aventuras de Sabrina) y una situación súper cómica.
De verdad, merece mucho la pena. Os dejo el tráiler y continúo después con spoilerss.
CONTINÚO CON SPOILERS
Tras un análisis de la sangre de uno de los bichos que pudieron capturar, llegan a la conclusión de que los grabbers necesitan tan sólo agua y sangre para sobrevivir, así que deciden dejarlos sin una de las dos cosas… Agua? Aislarlos y prenderles fuego? Secarlos como pasas? Noooo, eso sería lo fácil.
Si se alcoholizan por encima de las 10 pintas serán inmunes a los grabbers.
Y con una premisa así… quién le va a decir que no a la película?
Acción, risas, situaciones irrealmente absurdas… genialidad.